Estatua Viviente Historia De Terror 2023

Estatua Viviente, Historia De Terror… Aún lo recuerdo como si hubiera sido ayer, aquellos sucesos marcaron mi vida por completo, mismos que al contarlos usualmente recibo burlas sobre ello, pues es una anécdota e historia la cual transformó mi valentía y miedo.

Toda mi vida he estado radicado en el histórico estado de Puebla, un lugar dentro de México, el cual cuenta con múltiples leyendas, costumbres y tradiciones las cuales lo hacen único.

Cabe resaltar que uno de los casos más misteriosos que pude presenciar fue el de la famosa estatua de la china poblano mismo que con el paso de los años no solo  ha representado una riqueza cultural, sino también una de terror, pues muchos ciudadanos aseguraban acontecimientos extraños los cuales se referían a esa estatua, pues en las madrugadas está desaparecía misteriosamente, acto dudoso, pues era una reliquia con un peso extremadamente grande, casi imposible de cargar.

Una noche luego de una salida y varios tragos con amigos salimos del bar de madrugada, ninguno de nosotros se encontraba en condiciones de manejar, sin embargo, no planeábamos quedarnos en ese lugar, así que después de elegir al conductor designado el cual era yo, nos dirigimos al auto y dimos marcha camino a casa.

El camino cada vez se hacía más lento y con curvas que ni yo mismo recordaba, todo resultaba más peligroso y extraño para mi, sin pensar  lo que después sucedería.

Mientras manejaba un poco más, un aire desconocido comenzaba a recorrerme por las venas,  así que en el momento menos inesperado, pude ver como una mujer se atravesaba en medio de mi camino, como si hubiera sido un acto a propósito.

En ese instante supe que era un espectro el cual nos estaba persiguiendo y aún que la mayor posibilidad que existía era que fuera producto de mi imaginación o estado etílico, seguía sin descartar lo sucedido.

Estatua Viviente Historia De Terror

Claramente pensaba que aquel suceso lo había visto únicamente yo, no obstante, uno de mis amigos al día siguiente me dijo que había visto lo mismo, pero sabía que si lo comentaba en el grupo, se convertiría en una burla.

Al día siguiente en camino al trabajo, pude observar en el periódico un encabezado el cual mencionaba la desaparición de aquella estatua, pues el centro de la ciudad misteriosamente se había quedado sin monumento unas horas de la madrugada.

Al final todas las piezas tenían sentido y aunque todo éste cúmulo  de sucesos parecían totalmente descabellados, aquel espectro que habíamos visto era totalmente real y no solo eso, había sido esa mujer con aspecto de china poblana, pues recuerdo perfectamente tu peculiaridad de su traje.

No podía dejar de pensar en aquella idea, el simple hecho de recordarlo me hacía parecer un maniático. Minutos más tarde mi amigo quien había visto aquel suceso, me marcó desesperado comentándome que no había podido conciliar el sueño en toda la noche.

Así que luego de una larga conversación e incertidumbre, mi amigo Gabriel y yo nos dirigimos a la misma hora de madrugada donde pasó el incidente y aunque nuestro miedo era muy grande, la duda lo era aún más.

Al llegar al lugar, sentíamos un frío indescriptible, la zona se encontraba totalmente vacía y claramente el suceso que nos había impactado aquella noche, tenía pinta de que se podría repetir.

Nos dirigimos al monumento y automáticamente nos percatamos Gabriel y yo que este nuevamente había desaparecido, no había rastro alguno de aquella estatua, era algo tan raro y difícil de explicar que seguíamos sin entender la situación. Nos acercamos poco a poco al libro de datos en el cual pudimos extraer información al respecto, pues venían datos como año, nombre, entre otros.

Rápidamente decidimos retirarnos del lugar , pues sabíamos que en cualquier momento algún espectro se acercara hacía nosotros.

Días después, decidimos buscar en la web aquellos datos anteriormente recaudados, fue ahí cuando nos dimos cuenta que aquel monumento no solo era una reliquia cultural, si no también un homenaje a una de las mujeres poblanas que fueron asesinadas hace aproximadamente cien años, realmente no especificaba el motivo de su muerte, pero sí afirmaba que había sido una muy cruel la cual al parecer había impactado a toda la ciudadanía de aquel entonces.

 ¿Aquella alma en pena se había apropiado de ese monumento? Me pregunté profundamente , a lo que mi buen amigo asintió con la cabeza, pues a pesar de ser un caso muy triste y cruel, toda esta situación pasó a volverse un caso de terror, pues este espíritu se había encargado de alborotar lo que pasaba en la ciudad.

Era impresionante la idea de pensar como un monumento podría tener la capacidad de moverse de lugar y desaparecer por las noches y aunque este caso no tuviera antecedentes de daños, sabíamos perfectamente que no era algo común o que pasara en cualquier lugar.

Analizando aquella situación comencé a pensar en lo triste de aquella alma, pues lo único que imaginaba era que sin duda alguna buscaba el descanso eteno y de lo que sí estaba seguro es que llevaba más de cien años buscándolo.

¿Cómo poder ayudar a un ser que probablemente me lastimaría? No lo sabía, pero intentaría averiguarlo.

Con miedo y angustia me dirigí al lugar del monumento por la madrugada, me senté a su lado y comencé a preguntarle qué era lo que necesitaba para descansar, claramente en aquel momento no tuve una respuesta, por lo que decidí partir a mi casa con decepción y terror, pues desde Niño un tío aseguraba alejarnos de aquellas situaciones que comprometen seres, pues son puertas que abren portales.

Al llegar a casa, decidí seguí buscando información en la web y después de una investigación exhaustiva, pude encontrar el nombre de aquella mujer que había sido asesinada, sin embargo mi sueño y cansancio eran tan grandes que decidí ir a la cama.

Al momento de dormir, comencé a tener una serie de pesadillas en las cuales aquel monumento decía algo, al igual que me perseguía por todos lados, poco a poco me percataba que eran pesadillas, sin embargo, me era imposible despertar, era como si estuviera atrapado en mis propios sueños; estaba consciente de ello,  no obstante, en todo momento aquella estatua se hacía presente.

Las cosas fluían, al igual que mi miedo, por un momento llegué a pensar que nunca más despertaría, pues el simple hecho de escuchar todo el tiempo aquellos quejidos y lamentos, me hacía pensar en huir, mi cabeza cada vez daba vueltas, mismas que me pedían a gritos auxilio.

Conforme pasaban los días sentía como poco a poco iba enloqueciendo, me encontraba en una burbuja de idealizaciones y terror de la cual no podía salir, comencé a descuidar las cosas importantes de mi vida, entre ellas mi trabajo, familia y pareja.

Claramente tenía que hacer algo al respecto, pues no podía continuar con esta tortura, mi razón y estabilidad poco a poco se quebraba, trataba de evadir el paso y todo lo relacionado a aquel monumento, sin embargo, muy en el fondo sabía que en lugar de huir, debía afrontar mis miedos; pues era algo necesario.

Después de días al volver al trabajo, pude ver a mi buen amigo de aventuras, quien había visto días atrás lo mismo que yo, no obstante, aquel hombre se veía totalmente enloquecido, su semblante causaba terror, tenía unas ojeras tan grandes, las cuales eran demasiado profundas.

Al acercarme a él pude sentir aquel aire tan peculiar que percibí aquella noche, le pregunté qué era lo que realmente sucedía, me vio con unos ojos de miedo y me comenzó a hincarse pidiéndome ayuda, pues aquel hombre no podía sacar de su alma a la mujer que juntos vimos aquella noche.

Ese sujeto se veía tan  desesperado que parecía un desconocido para mi y realmente lo era, pues sus actitudes, miradas y forma de ser me hacían sobre pensar más allá las cosas de lo sucedido

Al día siguiente tratando de buscar la verdad de todo esto y que era lo que podía hacer al respecto, desperté con una terrible noticia, pues mi buen amigo en medio de la desesperación optó por suicidarse, suceso que nadie comprendía, pues él era un hombre con grandes ganas de vivir y un buen futuro por delante, sin embargo, aquellos fantasmas, o más bien aquella estatua lo había vuelto loco.

Realmente estaba confundido, así que decidí hablar con la verdad a todos mis conocidos, pues la mayoría comenzó a catalogarme como un loco, como si a mi amigo y a mi nos hubieran hechizado, cosa que quizá es cierto, pues mi abuelo decía que un espectro siempre tiene más poder sobre ti y aunque yo no quería aceptar la verdad de la situación, comenzaba a creer que esa frase era real, pues mi mente se encontraba en un pasaje desconocido, el cual me mantenía en una balanza de seguir con vida o tomar el mismo camino que mi amigo.

Un día caminando desolado por las calles de la ciudad, un hombre se acercó rápidamente a mi y en medio de tanta gente me jalo hacia una calle solitaria para preguntarme si era verdad lo que había visto hace meses, pues en una portada de un periódico se dio a conocer la noticia de aquel famoso monumento que se movía por las noches.

Me encontraba en esos momentos en un estado de shock, pues no sabía si contestar con la verdad o buscar alguna excusa para zafarme  de aquel hombre, sin embargo en medio de toda esta desesperación decidí hablar con la verdad y confesarle todo a ese sujeto extraño y de dudosa procedencia.

Así que en ese momento el hombre me entregó una cadena protectora, pues aseguró que aquel monumento me había elegido a mí para cambiar mi alma, pues después de tanto tiempo yo había sido la persona elegida, fue ahí cuando comprendí que estaba viviendo una realidad de la cual deseaba huir.

A partir de esa noche, inmediatamente tomé mis maletas y decidí huir del país y aunque han pasado años sigo pensando en que fue la mejor decisión de todas, pues a causa de esa leyenda local, mi vida  y razón estuvieron en riesgo, no obstante, las personas del pueblo con las que aún mantengo comunicación, afirman que aquella estatua se sigue cambiando de lugar en búsqueda de una alma pérdida…

Autor: Andrea Lezama

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