Los Gusanos Historia De Terror 2023

Los Gusanos Historia De Terror… Siempre escuchamos historias de brujería y de brujas de todos tipos y colores, a veces esas historias son tan increíbles que es entendible que lleguen a causar algo de desconfianza, pero lo que si es seguro, es que siempre pensamos que a nosotros jamás nos sucederán ese tipo de cosas, es más, a veces no conocemos a nadie que le haya pasado.

Ese era mi pensar en aquel 2012, para ese entonces ya había pasado un año con muchos contratiempos, necesitaba un respiro, el trabajo me estaba matando, eran bastante demandante.

Iba a pedir mis vacaciones a mediados de Noviembre, no tenía muy claro a dónde quería viajar, pero sería a una ciudad lejana definitivamente.

Pero antes de tomar el avión debía encontrar a alguien que me ayudara a cuidar a mi perro, su nombre era bufón, siempre lo vestía con una playera del Cruz Azul, era de raza mediana, no daba lata, ese no era el problema, lo que ocurría era que casi todas las personas que conocía ya tenían uno o 2 perros.

Lo bueno que pude llegar a un acuerdo con el vecino de la esquina.

Esas fueron las mejores vacaciones que he tenido, volviendo pasé por bufón y fui a mi casa, pero, en cuanto puse un pie dentro pude sentir algo diferente, la casa me pareció otra, me explico, claramente era mi casa, visualmente nada había cambiado, pero aún así no me sentía en mi casa.

En la noche, cuando me estaba bañando, empecé a percibir un olor muy feo, como a una olla con frijoles echados a perder, pero yo nunca he sabido cómo poner los frijoles a cocer, entonces, evidentemente, no tenía sentido que oliera a frijoles podridos.

En cuanto salí de bañarme empecé a buscar de dónde venía ese olor, como no encontré nada opté por ponerme a barrer y a trapear.

Estaba en eso, al momento en que estaba barriendo unas columnas de ladrillos que tengo como decoración de la sala, vi que un pequeño gusano Blanco se estaba arrastrando en el suelo, me pareció raro, pero lo pisé sin más.

Entonces noté que en la columna había varios de esos gusanos, y parecían estar saliendo de uno de los ladrillos que aparte estaba como suelto.

Agarré la escoba al revés, es decir, con el palo para el frente, y con el palo de madera le pegué al ladrillo para tumbarlo, en cuanto hice ese pude ver que había cientos de esos asquerosos gusanos.

La imagen fue muy fuerte, corrí al patio para vomitar.

No sabía cómo le iba a hacer para deshacerme de esos gusanos, no quería ni verlos, esa noche dormí en el coche, al día siguiente le pagué a una persona para que se hiciera cargo de los gusanos y que de paso fumigara toda la casa.

Cuando la persona terminó me comentó que estaba raro porque no encontró nada que pudiera haber causado la aparición de tantos gusanos, solo se le ocurría una cosa pero no estaba seguro, su teoría era que a lo mejor yo había dejado en la basura un huevo y que los gusanos hubieran aparecido debido al proceso de putrefacción.

Empecé a tener mucho cuidado con todo lo que tiraba en la basura de la cocina, no quería más gusanos en mi casa, pero, una tarde que estaba tendiendo la ropa, noté que bufón tenía un comportamiento extraño, lo que hacía era que le estaba ladrando a un pedazo de tierra.

Yo pensé que a lo mejor ahí estaba un bicho grande, como una tarántula o uno de los bichos a los que les dicen chimuelos.

Terminé de tender la ropa y luego fui a revisar qué era aquello a lo que bufón le estaba ladrando, al principio no vi nada, pero como yo sé que hay bichos que se esconden debajo de la tierra, arranqué una rama del árbol y con la rama moví tantito la tierra, tremenda sorpresa me llevé cuando vi otro montón de gusanos.

Los Gusanos Historia De Terror

Rápido fui al baño, agarré una botella de cloro y otra de ácido, regresé al patio y les vacié las 2 botellas al montón de pequeños gusanos blancos, no me esperé a ver si se morían, en cuanto les vacié los líquidos puse piedras encima para aplastar a los asquerosos insectos.

Volví al interior de la casa y empecé a tratar de recordar si la persona que había fumigado solo estuvo dentro o si también había ido al patio, como no me pude acordar decidí llamarlo para preguntarle directamente, él me dijo que sí.

Ahí empecé a pensar que a lo mejor debajo de mi casa había una especie de nido o algo por el estilo.

Al día siguiente todo fue a peor, cuando llegué del trabajo encontré a bufón muerto, estaba tirado al lado de su vasija de croquetas, que en lugar de croquetas tenía puros gusanos muertos.

Me dio un poco de miedo hacer contacto con mi perro, me puse unos guantes, metí a bufón en una bolsa negra y lo puse en el bote de la basura, hubiera preferido enterrarlo en el patio pero me daba terror encontrarme con más gusanos.

Eso definitivamente ya no era algo normal, pero una parte de mí se rehusaba a creer que pudiera tratarse de magia negra, yo era súper escéptico con esas cosas, pero, nada más para salir de dudas compré el periódico de la esquina porque ahí por lo general solían anunciarse supuestas brujas.

Y sí encontré una, en su anuncio venía la dirección de su local y su número de contacto, yo opté por ir al local, si en verdad pediría ayuda esotérica tendría que ser de forma presencial.

Llegué al local, que era una casa ubicada en una colonia cualquiera de la ciudad, yo me esperaba una casa vieja, sucia, con telarañas y pintada de un color poco común, pero nada de eso, era un lugar normal, no destacaba en nada.

La bruja era una señora de unos 40 y tantos, tenía un poco de sobrepeso, su cabello estaba desarreglado, era más alta que yo y tiene ambos brazos cubiertos de tatuajes.

Como yo iba escéptico y desconfiado lo primero que hice fue preguntarle cuánto cobraba, la bruja dijo que las consultas eran gratis, que lo que se pagaba eran los trabajos, con eso que me dijo me sentí más tranquilo.

Le conté todo y ella me dijo que lo más probable es que alguien hubiera enterrado un trabajo muy oscuro en mi patio, eso o podía tratarse de una maldición, yo le pregunté cómo sabríamos la respuesta, la bruja me contestó que teníamos que consultar al oráculo.

Caminamos hasta una habitación que estaba iluminada de forma muy tenue por algunas velas, dentro estaba encadenado un anciano con todo su cuerpo cubierto de sudor y de muchas marcas que parecían ser quemaduras de cigarro.

Antes de que yo dijera cualquier cosa la bruja me entregó un cigarro ya prendido, entendí lo que había que hacer pero me negué de inmediato.

Entonces la mujer me dijo: “el mal existe, y el mal se oculta en la oscuridad, se aleja de la luz, porque la luz es la verdad, y el mal no soporta la verdad”.

Luego de decir eso fue hasta una de las ventanas y abrió la cortina para que entrara toda la luz del Sol, en cuanto los rayos solares tocaron el cuerpo del anciano le empezó a salir humo negro del cuerpo y al mismo tiempo se puso a gritar palabras raras, yo creo que en otro idioma.

La bruja cerró la cortina y me explicó que un demonio habitaba dentro del cuerpo del anciano, pero que el Demonio no podía ser expulsado de ese cuerpo porque el anciano acababa de morir cuando fue poseído, lo que significaba que no había un alma dentro de ese cuerpo, el Demonio estaba ocupando el espacio del alma.

Entonces, al momento de yo apagar el cigarro en el cuerpo del anciano no lo estaba lastimando porque, a pesar de que su cuerpo seguía funcionando, él ya estaba muerto.

Palabras más, palabras menos, el chiste es que me convenció de hacerlo, la manera en la que funcionaba era que yo hacía la pregunta al mismo tiempo que apagaba el cigarro contra el cuerpo poseído.

Lo hice, pregunté si se trataba de una maldición o de un trabajo enterrado y obtuve mi respuesta, era un trabajo enterrado.

La bruja me dijo que con esa confirmación terminaba el tiempo gratis, que cualquier cosa que se hiciera a partir de ese momento si debía ser cubierto de forma económica.

Volvimos a la sala y nos sentamos, la bruja me comentó que para poder desenterrar correctamente el trabajo había que hacer varias cosas, lo primero era consagrar un palosanto y cubrirlo con un manto lunar, eso significaba que el palosanto debía recibir luz lunar durante 3 días seguidos.

Ese palosanto sería clavado en la tierra para purificarla durante el ritual de desentierro.

También había que elaborar una mezcla de hierbas que eran difíciles de conseguir, esa mezcla de hierbas sería quemada en el sahumerio durante el ritual.

Otra cosa que se iba a ocupar era un poco de agua bendita, pero no podía ser comprada y tampoco se le podía pedir a un sacerdote, el agua bendita debía ser robada para poder utilizarla durante el ritual.

La única iglesia cerca de mi casa era la Catedral, y evidentemente de ahí era imposible robar el agua bendita por la afluencia de gente, entonces fui a una iglesia que estaba en una colonia nueva, entonces no debía asistir tanta gente.

El párroco de esa iglesia oficiaba misas a las 7 de la mañana, a las 2 de la tarde, y a las 8 de la noche, el resto del tiempo la iglesia permanecía abierta pero no ocurría nada, por lo tanto si iba como a las 10 de la mañana, cuando los niños estaban en la escuela y los adultos estaban trabajando, eso de robar el agua bendita no debería ser tan difícil.

Antes de llegar a la iglesia pasé a una farmacia para comprar un vaso de muestra, era un recipiente discreto que podía meter y sacar rápido de la pila del agua bendita.

Ya llegué al lugar, estaba vacío, caminé hasta la pila, que estaba cerca del altar, y, sintiendo unos nervios como nunca antes había sentido en mi vida, abrí el vaso de muestra, lo llené de agua bendita y salí volando de la iglesia.

Tres días después me reuní con la bruja, la llevé a mi casa, cuando estuvimos en el patio ella sacó una especie de tubos metálicos muy delgados que tenían forma de la letra “L” mayúscula.

Agarró un tubo de esos en cada mano y empezó a caminar por el patio con los ojos cerrados, esos tubos delgados se movían por alguna razón, era como si estuvieran apuntando en una dirección, y la bruja caminaba en la dirección en la que apuntaban esos tubos.

Yo supongo que los tubos solo funcionaban cuando la bruja tenía los ojos cerrados, porque de lo contrario no entiendo la necesidad de estar caminando a ciegas.

Luego de un momento, los tubos empezaron a girar en todas direcciones, en ese momento la bruja se detuvo y abrió los ojos, luego, de un morral que traía en la espalda sacó el palosanto, dijo algunas oraciones antes de clavar el palosanto en el pedazo de tierra que estaba frente a sus pies.

Después la bruja sacó el sahumerio que ya contenía la mezcla de hierbas, lo colgó de la parte superior del palosanto, luego me pidió el agua bendita, se la entregué y la vertió dentro del sahumerio y sobre el palosanto.

La bruja sacó un cigarro, le dio 2 fumadas y luego lo usó para prenderle fuego al palosanto, las llamas, por alguna razón, se empezaron a extender siguiendo al agua bendita, como si fuera alcohol o gasolina, pero simplemente era agua, yo mismo la tomé.

Con el humo se formaron siluetas extrañas que parecían moverse como si tuvieran vida propia, y la bruja observaba detenidamente esas siluetas, era como si estuviera tratando de descifrar un mensaje encriptado o algo así.

Ahí estuve parado en mi patio por más de 20 minutos hasta que, a pesar de que el fuego seguía encendido, ya no estaba desprendiendo humo.

La bruja agarró su sahumerio, lo guardó, se acercó a donde estaba yo y me dijo que dejara que el palosanto se consumiera por completo, que eso podría tardar de 12 a 24 horas, y que después de eso fuera a buscarla para proseguir con la siguiente parte del ritual, me advirtió que lo más probable era que tuviera pesadillas y que pasaran algunas cosas durante la madrugada, pero que me mantuviera tranquilo porque las energías oscuras no podían hacerme daño debido al palosanto.

Ella se fue, yo saqué una silla y me quedé sentado observando como el sahumerio se quemaba muy despacio, además de que no estaba saliendo nada de humo, una cosa muy rara la verdad.

Cuando se hizo de noche me empezó a dar sueño y me fui a dormir, pero las pesadillas no tardaron en despertarme.

Revisé el reloj y eran las 2 y tanto de la madrugada, fui a la cocina para agarrar una cerveza para que me diera un poco de sueño y poder volver a dormir, sin embargo, cuando pasé por el comedor, el servilletero se movió, yo volteé rápido y vi que se movió otra vez, quise acercarme a la mesa pero en ese momento todas las servilletas volaron por el comedor.

Yo estaba estupefacto viendo las servilletas caer al suelo cuando escuché un ruido, era la ventana del baño, la que daba hacia el pasillo, se estaba abriendo y cerrando con fuerza, pero mucha fuerza, de hecho yo pensé que el vidrio se iba a romper en cualquier momento.

Después se empezaron a escuchar ruidos extraños, no era un sonido en particular, mas bien era como la mezcla de varias cosas, se podían oír canicas, rasguños, golpes, y muchos pasos, como si alguien estuviera corriendo encima del techo.

La situación se estaba poniendo muy pesada, ya ni siquiera agarré la cerveza, lo que yo quería era salir de la casa, pero, cuando me acerqué a la puerta, un brillo de muchos colores empezó a entrar por el marco de la puerta.

Al mismo tiempo empezaron a aparecer huellas de pies descalzos por el piso de toda la casa, las huellas estaban hechas como son sangre, el tamaño de los pies era como de niño pequeño.

Y de pronto todo se detuvo, los ruidos, el golpe de la ventana del baño, todo.

Con un poco de miedo salí al patio y el palosanto ya había terminado de ser consumido por el fuego.

Era muy tarde para ir a buscar a la bruja, así que dormí un poco y ya en la mañana fui con la bruja, la llevé a casa, escarbó y desenterró el trabajo que habían colocado en mi patio, estaba dentro de una playera desgarrada, era una bola de cabellos largos de todos colores, la bola de cabello estaba empapada en un líquido viscoso y mal oliente.

La bruja lo agarró con ambas manos y fue al frente de mi casa para tirarlo en el bote de basura.

Antes de que ella se fuera le pregunté si no había alguna forma de poder saber quién había dejado ese mugrero enterrado en mi patio, o por lo menos saber cuál era el motivo, ella me contestó que sí, pero que eso conllevaba una serie de cosas tan densas que me aseguró que yo querría dar marcha atrás antes de llegar al fondo del asunto.

Autor: Desconocido

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