Las Brujas, Historia De Terror 2023.

Las Brujas, Historia De Terror… En el estado de Michoacán, visité a un primo que hacía tiempo no veía, había llegado a las 3 de la tarde platicamos hasta entrada la noche, junto con mis tíos, cuando mi primo me dice tú crees en la brujas, le respondí si claro si supieras cuantas veces he quitado esos trabajos.

Mi primo me vio, te quiero enseñar algo mañana, nos fuimos a dormir, por la mañana después del desayuno, mi primo me dice ven te enseñare algo, caminamos un poco y nos salimos del camino rumbo a un cerro.

Subimos un poco al cerro había un camino, se veía que era frecuente el subir al cerro, cuando llegamos a una piedras grandes, mi primo subió en una de ellas, yo lo seguí detrás había una cueva, mi primo llevaba una lámpara, entramos olía feo, realmente pensé que había algún animal muerto.

Iluminó y pude ver algunos grabados en la pared algunos dibujados y otros tallados en la piedra, en un momento se escuchó un lamento y algo que se arrastraba, mi primo alumbró y una sombra negra salió corriendo, mi primo dijo ya se fue.

Caminamos un poco más y ahí estaba un altar con varias imágenes y veladoras se podía ver restos de sangre y carne, mi primo tomó una piedra parecía obsidiana, la guardó en un paliacate dentro de su chamarra y seguimos mirando y se escuchaban voces poco a poco se hacían más claras, mi primo me señaló la salida.

Caminamos rápido salimos de la cueva empezamos a bajar, cerca de nosotros cayó una piedra, volteamos hacia la cueva estaba una anciana la cubría un poco una tela negra y sus ojos eran rojos, comenzó a soltar chillidos como de cerdo.

Las Brujas, Historia De Terror

Mi primo comenzó a caminar más rápido, yo también ,ya estando a una distancia vimos a la mujer, ahí parada en las rocas de la entrada y junto a ella otras dos figuras, llegando al camino, corrimos hasta llegar a la plaza del pueblo, ahí mi primo me contó que eran brujas y que se roban los animales de granja, a él le habían robado un par de gallos de pelea ,por eso fue para cobrarse con algo.

Me enseñó la piedra era más bien un cristal negro, pero a la luz del sol era café, me invitó a comer mi primo el me contaba mas historias del lugar y justo enfrente de nosotros, se paró una mujer que tal vez tenía 37 o 40 años su mirada era bastante fuerte y nos veía con coraje , yo la miré, en ese tiempo yo tenía un pequeño rosario en mi muñeca, me lo quité y lo extendí, comencé a rezar, mi primo no sabia que hace.

La mujer se dio vuelta y se fue, mi primo me dijo que esa mujer se veía pocas veces siempre estaba en su casa encerrada, terminamos de comer, mi primo se veía nervioso y comenzó a rascarse el brazo derecho, así estuvo un rato mientras el me enseñaba distintas partes del pueblo, yo sentía que nos seguían pude ver un par de veces a la misma mujer, la seguí un poco con la mirada y mi primo se quejó de un dolor en el brazo cuando lo vi tenía un moretón y el brazo hinchado, los dedos de la mano bastante rojos.

Caminamos hacia una farmacia, compré alcohol y gasas también una venda, moje el algodón con el alcohol y lo pase por su brazo , el sentía que le quemaba pero con el alcohol sentía un poco de alivio, fuimos a buscar a un doctor, afortunadamente encontramos uno, el pasó a la consulta médica y yo sali del consultorio.

Tenía la chamarra de mi primo y vi a la mujer, saque mi rosario lo puse en mi mano y camine hacia ella, le dije, se que nos estas siguiendo quien eres, ella me respondió “eso no importa dame lo que el otro hombre tomó de la cueva”.

Le dije lo que le pasa en el brazo es culpa de eso verdad, ella respondió “a quien me roba recibe el castigo y así será”.

Yo le respondí , tú también le robaste a mi primo sus gallos, ella respondió “ fueron buenos sacrificios “ le dije y si te regreso ese cristal mi primo va a sanar, ella comenzó a reír y respondió “claro que no”, saque el cristal y lo rodee con mi rosario, aún tenía un poco de alcohol lo saque, la mujer me miró y dijo “ yo sé que tu miras a los muertos y sé que has quitado los trabajos de otras hermanas y hermanos míos.

Muchos de ellos te quieren muerto”, le respondí muchos de esos trabajos han destruido familias y si los he quitado cada uno se condena al hacer eso también te va a pasar a ti, quita ese trabajo a mi primo o prendo fuego a este cristal, a mí no me importa que la gente mire.

Ella sacó de su ropa una planta comenzó a masticarla y la escupió en una bolsa, ella respondió “toma pónselo en su brazo mañana estará bien dile que no vuelva a subir o ya no va a bajar”.

Yo tomé la bolsa vi que decía la verdad, le regresé el cristal y se dio vuelta, mi primo salió del consultorio y me llamó cuando regresé la mirada, ella se había ido, caminé con mi primo a su casa mi tía lo revisó del brazo y le dijo está inflamado.

Mi primo metió su mano izquierda en la bolsa de la chamarra pero no encontró nada, que pasó con el cristal primo, yo le respondí tal vez se me calló en el camino, saqué lo que escupió la bruja le dije ven, le quité la venda del brazo y comencé a untar esas hierba, olía feo pero seguí,mi primo me dijo lo mismo pero sentía que algo frio le calmaba el dolor.

En la noche su brazo y dedos de la mano estaba menos hinchados y por la mañana ya estaba completamente bien, le dije esto me lo dio la bruja de la cueva, me dijo que jamás vuelvas a subir o no bajarás, yo me fui a los dos días, un año después de eso, mi tía me avisó que mi primo desapareció, lleva ya 10 años desaparecido, unos vecinos vieron a mi primo que subía el cerro yo sabía el por qué desapareció, le conté a mi tía, cuando fueron a investigar solo encontraron la playera de mi primo, jamás encontraron el cuerpo, tampoco se volvió a ver la mujer, nunca pude ver a mi primo de nuevo.

Autor: Ramiro Contreras.

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