Nahual En Tecate Historia De Terror 2022
Nahual en tecate historia de terror… Soy de Baja California, en una ciudad ubicada en la frontera noroeste, Tecate, se dice que el nombre de la ciudad tiene un origen místico, los registros sugieren que podría significar Valle de Lechuzas, o Tierra de Lechuzas.
Aquí hay una montaña que los antiguos consideraban sagrada, ya que era ahí donde se realizaban los rituales y sacrificios en honor a los dioses.
Es precisamente en esa montaña donde comienza la historia que voy a relatar, ocurrió hace muchísimos años, cuando mi abuela era pequeña, tenía apenas 7 años.
Dice que una noche cualquiera escucharon el inconfundible sonido de unas cadenas arrastrándose, y también se escucharon terribles gritos.
Al amanecer un niño había desaparecido de su cuarto, nadie supo qué fue lo que sucedió, no hubo testigos, lo único que quedó fue el dolor de los padres.
En aquel entonces hacía menos de un año que había terminado la Revolución, así que todos los hombres tenían armas, al menos los que habían sobrevivido a la guerra y vuelto a casa.
Así que, en cuanto se supo que se habían robado a un niño algunos hombres se pusieron de acuerdo para montar una pequeña guardia nocturna, para así prevenir que se repitiera el terrible suceso.
Sin embargo, la noche siguiente, algo intentó llevarse a mi abuela, obviamente no tuvo éxito, en cuanto esa cosa entró por la ventana mi abuela despertó y se puso a gritar con mucha desesperación, eso inmediatamente alertó a los hombres que montaban la guardia y en menos de un minuto ya estaban dentro de la casa dando disparos.
No mataron a la criatura, ni siquiera la acertaron un tiro, pero al menos pudieron evitar que se llevara a mi abuela.
El siguiente ataque lo sufrió un vecino de mi abuela, afortunadamente la víctima no fue una persona, una chiva fue asesinada.
Mi abuela cuenta que, por curiosa, fue a ver la escena en cuanto la noticia se supo, ella quedó traumatizada ante semejante cosa.
La chiva estaba tirada en el suelo, tumbada sobre uno de sus costados, su cabeza estaba intacta, sin heridas, el pelo del animal estaba regado por todos lados, había muy poca sangre, pero, del cuello para abajo, la chiva estaba prácticamente en los huesos, casi no había carne en el animal muerto.
La gente comenzó a murmurar, y con justa razón, viendo cómo había quedado la chiva, nadie se quería ni imaginar cómo habría terminado el bebé que había sido robado.
Nadie veía a la criatura, pero aún así atacaba, su siguiente acto también fue frustrado, intentó llevarse a un niño, pero el padre del infante estaba armado y pudo darle un balazo a la criatura.
La bestia soltó al niño y huyó, volando, ante el incrédulo hombre que acababa de dispararle. Lo más extraño de aquella situación fue la marca que le quedó al niño, eran 4 garras, pero la herida estaba caliente, como si el niño se hubiera quemado con aceite o con un sartén.
Nahual En Tecate Historia De Terror
Mi abuela cuenta que después de ese intento de ataque hubo algunos días de tranquilidad, hasta los hombres dejaron de hacer guardia.
Pero, una mañana, en cuanto las personas salieron de sus casa a recibir los primeros rayos de sol, encontraron una escena digna de una película de terror, todos los animales estaban muertos y regados por todas partes, chivos, borregos, puercos, perros y gatos, solo las crías se habían salvado de la muerte.
Todos estaban de acuerdo en que la criatura voladora estaba molesta por el balazo que le habían acertado días antes.
La guardia se volvió a instalar, el que se convertiría en mi abuelo se unió a la guardia, el apenas tenía 16 años, sí, mis abuelos se llevan 11 años de diferencia.
Bueno, mi abuelo dice que la primer noche que él estuvo en la guardia pudo ver a la criatura, pasó volando por encima de ellos, a unos 100 metros, sus alas eran grandes, su cuerpo no tanto, mi abuelo dice que él le calcula que medía como un metro masomenos.
La gente ya tenía miedo de salir de sus casas en la noche.
En una ocasión el hermano menor de mi abuela se puso malo, y había que ir de forma urgente por ayuda, su hermano menor estaba ardiendo en fiebre, entonces su mamá la mandó a ella junto con su hermano mayor, su mamá no fue para cuidar al pequeño, y su papá no podía ir porque estaba en la guardia.
Entonces mi abuela y su hermano mayor fueron con lo más parecido a un doctor que ellos conocían, se trataba de una enfermera, la cuestión era que la enfermera vivía a una hora de ahí, así que se fueron lo más rápido que podían.
Ya casi llegaban cuando vieron, a lo lejos, como un bulto cayó sobre las ramas de un gran árbol. Era una sombra muy oscura, ni siquiera la luz de la luna le daba tan siquiera un poco de visibilidad.
El corazón de mi abuela comenzó a latir muy fuerte, mientras su hermano mayor se puso frente a ella, intentando hacerse el valiente y protegerla, al mismo tiempo que avanzaban lentamente para llegar con la enfermera.
No fueron atacados.
Cuando iban a partir de regreso, ya con la enfermera, la criatura ya se había ido.
El hermano menor de mi abuela se pudo recuperar sin mayores complicaciones.
Cuando mi abuela y su hermano mayor contaron lo que habían visto no los dejaron volver con la enfermera, fue mi abuelo el que se ofrecería, esa fue la primera vez que mis abuelos intercambiaron palabras.
El camino de ida estuvo todo tranquilo, pero cuando mi abuelo iba de regreso, como a medio camino, escuchó un brumoso aleteo, al girar su mirada hacia arriba vio a la criatura.
Mi abuelo sacó su arma y comenzó a dispararle sin atinarle ni una sola vez, la criatura se burlaba de él, de forma literal, emitía un sonido que se asemejaba a una carcajada humana.
Eso fue lo que rompió la valentía de mi abuelo y entonces comenzó a correr, la bestia lo seguía desde lejos y a lo alto. De vez en cuando mi abuelo le soltaba un tiro, obvio sin éxito.
Las balas se terminaron, la criatura, de alguna forma, se dio cuenta, entonces se abalanzó sobre mi abuelo, ya no estaba tan lejos de llegar, pudo sentir el aliento de esa cosa. Gritó con todas sus fuerzas, los hombres de la guardia corrieron y empezaron a disparar.
Mi abuelo recuerda que antes de que alguien le acertara un balazo pudo ver la cara de esa cosa, parecía una serpiente, sus ojos eran negros y su piel escamosa y brillante.
Luego de eso mi abuelo se negó rotundamente a volver a la guardia.
De nuevo hubo algunos días de calma, pero los hombres decidieron no cometer el mismo error dos veces, así que no levantaron la guardia.
Una noche la criatura atacó nuevamente, aterrizó a algunos metros de la guardia. Lo más extraño de todo, según se contó en el pueblo, es que la bestia caminaba en 4 patas, utilizaba sus alas como si fueran patas delanteras, eso le daba un aspecto aterrador.
Algunos hombres se quedaron paralizados del miedo al ver aquella cosa tan cerca y avanzando hacia ellos, los demás abrieron fuego.
La criatura se defendió como pudo, hubo heridos, algunos muy graves, pero ningún muerto, la bestia terminó gravemente herida, a tal punto que cuando intentó huir volando no pudo.
Se tuvo que alejar casi a rastras, mientras emitía el mismo sonido de carcajada, mi abuela escuchó esa risa, ya que asegura que se escuchó muy fuerte.
Los hombres se habían quedado sin balas así que optaron por no seguir a la criatura, estaba sangrando mucho, así que asumieron que no llegaría lejos, que iba a morir.
Todos volvieron a sus casas, alterados, pero confiando en que la pesadilla por fin había terminado.
En la mañana, y ya habiendo recargado munición, algunos hombres se adentraron en la maleza, yendo en la misma dirección en la que había ido la criatura, mi abuelo fue, quería asegurarse, quería ver el cuerpo sin vida de esa cosa.
Gran sorpresa se llevaron cuando, luego de andar por bastantes kilómetros, encontraron el cadáver de una persona, estaba completamente desnudo, tenía heridas de bala por todo el cuerpo.
Quedaron desconcertados, no lo podían creer, se trataba, sin duda alguna, de un Nahual.
Nunca se supo de dónde llegó ni porqué optó por atacar el pueblo, se sospecha que bajó desde la montaña sagrada, quizá las brujas tenían algo que ver, nadie sabe.
Lo que sí, es que pasaron décadas sin que nadie volviera a ver a un críptido volador aterrorizando el área de Tecate, esto cambió en la década de los noventas, cuando muchas personas, sobre todo los que tenían granjas o ranchos, me incluyo, sufrimos la muerte de nuestros animales a manos de otra criatura humanoide que podía volar.
Los que sean de Baja California, saben perfectamente a qué me refiero.
Autor: Ramiro Contreras
Derechos Reservados.
Deja un comentario