Mi Curiosidad Historia De Terror 2024

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Mi Curiosidad Historia De Terror 2024

Mi Curiosidad Historia De Terror… Nunca había sido un fanático de los espacios reducidos y oscuros. Pero en ese momento, allí estaba yo, al pie de un antiguo hospital psiquiátrico abandonado.

Era una noche fría de noviembre. La luna llena iluminaba a medio el imponente edificio, acentuando aún más su aura inquietante. Mi curiosidad por la historia oculta y los rumores de fantasmas que habitaban el lugar, habían llevado mis pies hasta ahí.

Empujé la linterna y entre. La puerta chirrió, y el eco resonó por el vasto corredor delantero. A pesar de que no había estado en uso durante décadas, el aire estaba impregnado con un olor enfermizo, como una mezcla de medicamentos caducados, polvo y un leve toque de moho.

Caminé por el pasillo, cada chirrido de mis zapatos parecía gritar en la estructura silenciosa. Pasé varias habitaciones desmoronadas, con camas oxidadas y aparatos médicos de épocas antiguas. Las paredes estaban cubiertas de graffiti, algunas de ellas parecían advertencias que decían: “No debiste venir aquí”. Traté de restablecer la importancia y seguir adelante.

Los rumores recién decían que había muchas personas curiosas que entraban a ese lugar, sin embargo, ya no volvían a salir.

Dejé caer mi linterna y el miedo invadió mi cuerpo. Rápidamente la recogí y apunté en dirección al sonido. Nada. Solo las paredes rotas y el corredor oscuro.

Pero una parte de mí no podía ignorar el hecho de que estaba completamente solo en un antiguo hospital psiquiátrico. No pude evitar preguntarme: ¿Y si los rumores eran ciertos? ¿Y si realmente había algo más en este lugar, algo oscuro y maligno?

Mis pensamientos se volvieron más oscuros, y empecé a arrepentirme de haber venido. Me recordé a mí mismo que era un explorador urbano, que había estado en peores lugares. Pero este era diferente, se sentía diferente. Había algo en el aire, algo en las sombras que me tenían en constante alerta.

Decidí que lo mejor era salir, pero cuando me di la vuelta para regresar, el camino parecía haber cambiado. El corredor que antes parecía simple y directo, ahora parecía un laberinto sin fin de puertas y pasillos oscuros. Las sombras parecían moverse y las paredes parecían cerrarse sobre mí.

Mi respiración se volvió pesada y mi corazón latía con fuerza. Sentía que cada sombra ocultaba algo, que cada rincón ocultaba un secreto que no quería descubrir. Pero ya estaba aquí, atrapado en este lugar. No podía simplemente dar media vuelta y salir, tenía que encontrar la salida.

Y entonces, lo oí. Un susurro suave y casi inaudible. Venía de una habitación al final del corredor. Casi parecía una voz humana, una voz llena de dolor y sufrimiento. No quería acercarme, pero algo me llevó hacia ella.

Al entrar en la habitación, la luz de mi linterna reveló una figura en la esquina. Me quedé helado en el acto, mi sangre se volvió hielo y el terror me inundó. La figura, o más bien, lo que dejó de ella, se levantó lentamente y miró en mi dirección con ojos vacíos y sin vida.

Era demasiado tarde para arrepentirme, ya estaba aquí. Y en ese momento, supe que algo terrible estaba a punto de suceder.

La figura emitió un grito lastimero que me heló la sangre. Intenté retroceder, pero mis piernas se negaron a moverse. Estaba como paralizado, Salí al corredor y corrí. Pero el edificio parecía jugar conmigo, cada pasillo conducía a otro y cada puerta se abría a una habitación más oscura que la anterior. Los sonidos del hospital aumentan, chillidos lejanos, risas bajas y susurros apenas audibles llenaban el aire.

Corrí sin rumbo, luchando por mantener la orientación, pero la estructura del hospital parecía cambiar con cada giro. Pasillos que antes parecían rectos, ahora se curvaban y torcía en ángulos imposibles. Puertas que antes estaban cerradas, ahora estaban abiertas revelando más de la oscuridad del edificio.

El susurro que había oído antes se convirtió en un grito constante, resonando en mis oídos, volviéndome loco. Podía oír voces en mi cabeza, risas,El sonido de mis propios pasos resonaba en el silencio, y las sombras bailaban a mi alrededor, como si estuvieran vivas. Las voces se volvieron más fuertes, llenando mi mente, ahogando mis pensamientos.

Rápidamente corrí hacia un cuarto pequeño, el cual al  parecer era una bodega, fue ahí cuando pude ver a una persona real la cual me hacía señas de que guardara silencio, fue ahí cuando no supe como reaccionar, pues no estaba solo.

En un último intento desesperado, saqué mi teléfono móvil. Tembloroso, intenté marcar un número, cualquier número, pero mi pantalla mostraba “Sin señal”. Intenté enviar un mensaje de texto, una llamada de emergencia, cualquier cosa que pudiera conectar con el exterior. Pero no había nada. Ninguna barra, ninguna red, ninguna señal.

Mi único vínculo con el mundo exterior estaba muerto, y con él, cualquier esperanza de ser rescatado. Las paredes parecían cerrarse sobre mí y las voces en mi cabeza aumentaron en intensidad. La desesperación me embargó y todo lo que podía pensar era en el error que había sido venir a este lugar.

Entonces, un sonido. Un sonido distinto a los demás, un sonido real. Pasos. Algo o alguien se acercaba a mí en la oscuridad. Mi corazón latía con fuerza y podía sentir el frío sudor corriendo por mi frente, aquella mujer que se encontraba en la misma habitación parecía tener varios días ahí, su rostro estaba cubierto de cicatrices y su expresión era de un dolor inmenso, había una especie de familiaridad.

En ese momento me percate que esa mujer se encontraba en medio de un círculo de sal, la cual al mirarme dudaba si era una persona real u otro de esos espíritus que se encontraban en el hospital.

Los círculos de sal de protección son una práctica utilizada en diversas tradiciones espirituales y creencias populares como una forma de crear un espacio seguro y protegido. Se cree que la sal tiene propiedades purificadoras y de protección, y al dibujar o esparcir un círculo de sal alrededor de uno mismo, de un objeto o de un área, se busca establecer una barrera que impida la entrada de energías negativas, entidades indeseables o influencias perjudiciales.

En muchas culturas, la sal se considera un elemento sagrado y se le atribuyen poderes de limpieza y purificación. Se cree que al crear un círculo de sal, se forma una barrera que protege el espacio interior ya aquellos que están dentro de ella. Además de proteger contra energías negativas, algunos creen que los círculos de sal también pueden bloquear influencias malignas, malas intenciones o incluso entidades sobrenaturales no deseadas.

El proceso de crear un círculo de sal de protección puede variar según la tradición o creencia particular. Algunas personas simplemente esparcen sal alrededor de un área a lo largo de las entradas y ventanas de una casa, mientras que otros dibujan un círculo con sal en el suelo o en una superficie específica. Al hacerlo, se pueden recitar oraciones o mantras, visualizar la intención de protección o utilizar otros rituales asociados para fortalecer el efecto protector del círculo.

Había escuchado de que la eficacia y el significado de los círculos de sal de protección pueden variar según la creencia personal y la intención con la que se realice la práctica. Algunas personas lo consideran una medida simbólica para reforzar su propia seguridad y bienestar emocional, mientras que otras pueden creer en su capacidad para actuar como una verdadera barrera contra fuerzas negativas.

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Al regresar  a mi realidad, trate de  mantener contacto con esa mujer la cual seguía en duda si era real, tenía los ojos rojos y un aspecto muy pálido, claramente se encontraba un poco ida y al percatarse de mi presencia, me gritó que huyera lo más lejos que pudiera, pues este lugar al parecer ya no tenía salida, fue en ese momento donde la mujer comenzó a enloquecer y tirar todas sus pertenencias, así que al tratar de levantar algunas cosas pude ver una credencial la cual tenía su nombre.

Se trataba de una mujer que estaba interna en el hospital psiquiátrico, era algo que me hacía estar en duda aún más, pues al investigar sobre el lugar, se sabía que ese lugar había dejado de laborar por varias negligencias médicas y fue por eso que fue cerrado y clausurado por el personal de salud.

En ese momento traté de acercarme a la mujer para preguntarle si se encontraba bien o si podía ayudarla, fue cuando en medio de su desesperación, me jalo y en cuestión de segundos me percaté que ya me encontraba dentro del círculo de sal, así que en ese momento de cierta forma me sentí protegido, sin embargo, había algo dentro de mí que deseaba huir de esa mujer.

Trate de mantener la calma en ese momento, sabía que debía hacerlo, fue en ese momento  donde aquella mujer empezó a contarme su historia, a decirme que estaba desesperada de vivir en aquel hospital, pues al parecer era el mismo infierno y desgraciadamente ella se encontraba condenada a vivir ahí por el resto de sus días, claramente no comprendía lo sucedido, no obstante, trate de analizar a esa mujer que estaba confiando en mi, crucé los brazo y mientras salía cada palabra de su boca, comenzaba a entender el porqué se encontraba en ese lugar.

La mujer comenzó a mencionar que sus hijos la habían metido al hospital psiquiátrico a raíz de la muerte de su hermano, del cual la habían culpado, sin embargo, me juró que ella no había sido la causante de aquel accidente, pues aseguraba que en esa ocasión un espectro estaba  en es lugar y se habia apropiado del alma de su hermano, así que al tratar de explicarle lo sucedido a sus familiares, afirmaron que estaba loca y la ingresaron inmediatamente al nosocomio en el cual ya llevaba 10 años de estancia.

Mientras la mujer seguía hablando, un llanto inundaba sus palabras, cada gesto y expresión me hacía saber que el mundo a veces es muy injusto, así que mientras relataba los hechos, llegó al punto donde comenzó a contarme acerca de las negligencias que realizaban en el hospital, pues solían pasarse de medicamentos para sedar a los enfermos y en varias ocasiones estos perdían la vida y mientras aumentaban los casos, los ruidos y espectros extraños se hacían  más presentes en el lugar.

Por un momento el personal de salud pensaba que eran los mismos pacientes quienes en su locura se encargaban de espantarlos y generar ese miedo en el hospital, sin embargo con el paso de los días el personal se comenzó a dar cuenta que ciertas actitudes y sucesos ya no eran normales.

Fue hasta que un día uno de los doctores amaneció ahorcado en su habitación, todos en ese momento pensaban que se había tratado de un suicidio, no obstante al dirigirse al baño, habían dejado un mensaje con rastros de sangre donde se mencionaba que se haría justicia por todos los pacientes que habían perdido la vida, así que al investigar si había sido uno de los internos y al revisar las cámaras de vigilancia, se percataron de sombras extrañas las cuales estaban en el lugar, fue así cuando comenzaron a sospechar de la existencia de almas en pena las cuales estaban en ese lugar.

Las cosas cada vez se salían más de control, los pacientes enloquecían más al igual que el personal, pues todos estaban renunciando  y el hospital se estaba quedando sin atención, la situación preocupaba cada vez más, pues algunos pacientes comenzaron a suicidarse o simplemente de un día para otro ya no contaban con signos vitales, fue entonces cuando familiares de los pacientes comenzaron a denunciar al lugar y este fue clausurado al poco tiempo.

Al escuchar aquella historia y como había surgido todo, comencé a cuestionar a la mujer del porqué ella seguía en ese lugar, así que rápidamente me respondió que su familia nunca llegó por ella, en ese momento fue la única que permaneció en ese lugar con la esperanza de que algún día ellos fueran, sin embargo nunca llegó, aquella mujer se había quedado sola, en medio de la oscuridad, la lejanía y el abandono de aquel lugar, no obstante al pensar que se encontraba sola, se equivocó completamente, pues en ese momento comenzaron a salir aquellas almas en pena, las cuales habían sido víctimas de todas las negligencias.

La mujer me había explicado que no era posible poder comprender si estaba loca, si las almas eran parte de su imaginación o simplemente se trataba de una circunstancia real, así que en medio de aquellas situaciones, la mujer trato de no perder más la calma en búsqueda de alguien que la salvara o al menos la comprendiera.

Pasaron, los días, incluso los meses y aquella mujer me contaba que sus únicos amigos eran aquellas almas, que si bien se trataba de algunas buenas, también había unas endemoniadas, no obstante, la situación se había vuelto difícil, pues una alma en particular se encargaba de seguirla todo el tiempo, ahí era el surgimiento de los círculos de sal, mismos que de cierta manera la protegían del mal y de aquel daño que podría ocasionar. 

Aquella historia resultaba muy triste, pareciera que se trataba de una persona la cual estaba atrapada en su mundo y nadie se había percatado de ello, era como si no conociera el exterior, como si no importara nada más que ese hospital.

En ese momento me llegó una vibra muy pesada, misma que me hizo sentir que debía irme en ese momento, sin embargo no sabía cómo, ni en qué momento, simplemente debía hacerlo para estar bien, pero de una u otra forma aquel círculo de sal, me había protegido de todo lo malo que pudiera suceder.

Trate de convencer a  la mujer que me compartiera un poco de su elemento, no obstante, ella sabía que era para poder irme de ese lugar y al aparecer ella ya no estaba dispuesta a quedarse sola, fue ahí cuando me percaté que no era tan buena como parecía, pues en medio de su desesperación quería retenerme entre sus engaños.

Claramente yo no estaba dispuesto a permitir esa situación, pues debía estar cuerdo para salir de ese lugar, al menos con vida, en ese momento ya no sabía a quién temerle más, si a esa mujer que claramente estaba enloqueciendo cada vez, o a los espíritus que nos rodeaban por todas partes.

Mi cabeza comenzó a dar vueltas cada vez más arrepintiéndome de todo lo que estaba sucediendo, así que trate de pensar estratégicamente, lo que debía hacer para que esa mujer me dejará tranquilo, así que después de pensar la situación, supe que lo correcto era decirle que la ayudaría a buscar a su familia con tener la condición de que ellos irían por ella y fuera feliz.

La mujer dudaba de mi palabra, le costaba confiar en mí, pero no tenía otra alternativa más me ayudarme, fue en ese momento donde supo que era lo mejor, así que tomo sus cosas y me dijo que la acompañara, pues no era tan fácil salir de ese lugar como parecía, pues quien trataba de hacerlo quizá si salía pero sin vida.

Con miedo y con la duda de si también podía confiar en aquella mujer se hacían cada vez más grandes, así que trate de controlar mis nervios y seguí el camino que quizá era el correcto, así que mientras recorríamos los pasillos del hospital , comenzaba a escuchar llantos, gritos y todo tipo de almas en pena que quizá venían con el propósito principal de causar miedo a mi ser.

Aquella mujer caminaba de una forma tan tranquila que era casi imposible  pensar que se trataba de la existencia de algún ser o alma en pena, así que claramente comencé a cuestionar a la mujer si ella reconocía que alma era, pues al final del día ella había permanecido casi toda su vida en aquel lugar, así que comenzó a contestar a mis preguntas, refiriendo que en su gran mayoría sabía de quién se trataba, desde su forma de caminar, de llorar, inclusive hasta de gritar.

Las cosas se habían salido de control, pero yo debía seguir con aquella guía de dudosa procedencia, no obstante, sabía que había algo más allá en esa situación, las cosas no estaban bien, el tiempo se había vuelto relativo, las horas pasaban, mi estómago pedía comida, incluso mi cuerpo pedía un baño, pero yo seguía en ese momento  y en ese lugar tratando de no enloquecer, ni perder la calma.

Las cosas iban resultando como quería, quizá no de la forma que había planeado pero en ese momento solo deseaba salir corriendo del lugar, así que trate de buscar una alternativa la cual me ayudará a conservar la calma y la mujer no se diera cuenta de mi nerviosismo.

Al llegar a la puerta de salida, la mujer tomó un amuleto y me hizo la pregunta de qué alma me causaba menos miedo, rápidamente respondí que la de un niño, pues se dice que esas son las más inocentes y puras, así que en medio de mi respuesta la fémina tomó el amuleto y comenzó a llamar a todas las almas, fue en ese momento, que llegaron desde las más pequeñas, hasta las más viejas, abrió el amuleto y como su fuera en cuento, aquella luz comenzó a meterse dentro de.

Esa era la promesa que había hecho sin estar consciente de la situación, en ese momento me habían atado a una alma hasta que cumpliera con la búsqueda de los familiares de esa mujer, fue ahí donde comprendí que debía conseguir a esa familia, si no estaría condenado de por vida.

Al salir del lugar, sentí un frío indescriptible, comencé a caminar y sentía un dolor muy fuerte en las piernas, realmente no comprendía las cosas, así que busque alternativas para poder irme, pareciera que había perdido la noción del tiempo por muchos días, no obstante, parecía que eran semanas , pero al darme cuenta de la realidad, ya habían transcurrido meses, mi familia me había estado buscando, inclusive ya me habían dado por muerto, así que al volver a casa todos se preocuparon, pues mi semblante no era el mismo, tenía un dolor que invadía todo mi cuerpo y no podía comprender lo que estaba sucediendo. 

Pasaron días de búsqueda, dejé de ser yo y me enfoque en cumplir mi promesa, sin embargo parecía que la familia de aquella mujer había desaparecido, no estaba más, por ningún lugar, ni por ninguna parte, así que eso implicaba al final tener que arrastrar con una alma en pena, pues a pesar de intentar de todo, quitarme el dije parecía casi imposible…

Autor: Andrea Lezama

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