La Mujer Me Quiere Controlar Historia de Terror

La Mujer Me Quiere Controlar Historia de Terror

Hace 4 años fui a una excursión con mis compañeros del salón a una construcción muy antigua La Mujer Me Quiere Controlar Historia de Terror. Unos amigos y yo nos separamos del grupo yendo hacia otro lado del lugar, recuerdo que había unos cuartos muy grandes y viejos. Entramos a uno de esos cuartos y empezamos a ver las cosas que guardaba aquel lugar. Cansados de las travesuras, mis amigos decidieron regresar al grupo, pero a mí me llamó la atención un cuadro que estaba puesto en la pared, mientras ellos se alejaron yo veía el cuadro atento. En medio del silencio escuché una voz de tras de mí, era la voz como de una mujer que decía: “Ayuda”, me asusté tanto que me salí corriendo del cuarto intentando alcanzar a mis amigos. Cuando llegué al grupo yo estaba aterrado, pero no quise decir nada en el momento pues se burlarían. Al día siguiente al despertar sentía un poco de molestia en mi espalda, no le presté atención hasta más tarde cuando esa molestia se convirtió más a fondo en dolor, fui al espejo y al fijarme quedé sorprendido pues no podía creer que tenía rasguños, traté de hacer memoria de cómo me los podría haber hecho, pero no había ni una sola razón. Al enseñarle aquellos rasguños a mi madre se molestó pues pensó que había sido mi gato que vive dentro de la casa. Ese día mi madre tenía que salir así que me quedé yo solo en la casa viendo la TV en la sala. Yo me sentía un poco incómodo, pues sentía como si alguien más estuviera conmigo, aunque en realidad no había nadie, comencé a sentir una extraña sensación como si alguien estuviera respirando frío atrás de , tenía muchos escalofríos cuando de pronto mi gato saltó al sillón viéndome fijamente y con cara amenazante, era como si no me reconociera y me tuviera odio, no comprendía por qué. Decidí alejarme y salir a la calle a caminar, ya que tenía miedo de estar adentro solo. En la noche a la hora de dormir, me recosté y me quedé profundamente dormido, comencé a soñar con una extraña mujer que vestía de negro y recuerdo perfecto que sus manos las tenía atadas como con una especie de cadena, la cara de aquella mujer no se le veía, era muy borrosa. Esa ocasión soñé que esa mujer estaba parada frente a mí, mientras yo estaba muriendo, cuando desperté de aquel horrible sueño, ya era de día y podía ver en mis brazos y piernas como con pequeños moretones, no sabía que estaba pasando, pero si sabía que no era algo muy bueno. Recuerdo que durante ese día me sentía muy mal, pues sentía un horrible dolor de cabeza y aparte hubo un momento donde la nariz comenzó a sangrarme de la nada, la estaba pasando muy mal. Pasaron días y estos sucesos eran muy constantes, siempre tenía pesadillas, dolores de cabeza, la nariz me sangraba y amanecía cada vez más con más moretones hasta que mi madre decidió llevarme a checar al hospital, era algo extraño e inexplicable pues los médicos decían que no tenía nada, yo estaba perfecto de salud, así que descartamos el hecho que pudiera ser anemia. A los días siguientes, yo me sentía diferente, me veía pálido y tenía un pésimo humor, recuerdo que uno de mis compañeros de clase cada vez que me veía decía que me veía muy demacrado, me llegaba a cansar que me lo dijeran que simplemente a veces ignoraba, mientras que otros se burlaban de , yo no quería estar más ahí, pues me sentía muy mal y cansado. Cuando llegó la salida uno de mis compañeros me seguía haciendo burlas y empujándome jugando, yo estaba muy molesto y no pude contenerme más, nunca en mi vida había sentido tanta rabia, así que volteo a verlo, y noté que cuando lo vi directamente a sus ojos, su cara se transformó. Lo notaba muy perturbado, el ruido de la gente se tornó silencioso en mi interior y surgió una voz en mi mente que decía: “LASTIMALO”, varias veces, era como si alguien dentro de mí quisiera controlarme, no pude evitar tomarlo del cuello fuerte y amenazarlo hasta que otros amigos más que estaban ahí intentaron separarme. El director había visto todo por lo que me llamó y me suspendieron. No sabía que estaba pasando, solo sabía que ese no era yo y realmente no quería lastimarlo. Mi hermana se enteró obviamente pues estamos en la misma escuela y me regañó mientras llegábamos a la casa, inexplicablemente comencé a llorar y mientras ella seguía hablando sentí nuevamente que me llenaba de rabia tanto que no pude controlar aventar a mi hermana fuerte hacia la pared, en segundos comencé a sentir mucha culpa y me disculpé de inmediato, pero ella asustada se levantó y se fue a encerrar directo a su cuarto. Estaba muy arrepentido de lo que estaba pasando, ya no podía seguir haciendo esos desplantes. Más tarde escuché que llegó mi mamá, y mi hermana fue corriendo hacía ella contándole todo, me regañó horrible y yo intentaba explicarle qué algo muy extraño estaba sucediendo, pero de lo enojada no me escuchaba. Días después mi madre contacta a una psicóloga por la desagradable conducta que tenía. La psicóloga le dijo a mi madre que intentara hablar conmigo. Mi madre escuchando el consejo de la psicóloga y ese día me habló para que fuera a la sala a conversar con ella, me preguntó qué era lo que pasaba conmigo porque yo nunca había tenido esos comportamientos, yo tenía miedo y le expliqué que no me sentía bien, le platiqué de la voz, de las pesadillas y el cansancio emocional que tenía, absolutamente todo se lo conté. Mi madre no creía en estas cosas, y la entiendo yo tampoco era muy creyente, pero esta vez yo estaba desesperado y ella tampoco entendía nada de lo que pasaba. Al día siguiente estábamos en la casa y escuché que en la puerta tocaron, mi mamá se acercó para abrir y después de eso escuché que me habló para que bajara. El compañero a quien había tomado del cuello se encontraba en la puerta junto a su mamá, él se acercó muy nervioso y nos explicó, que ese día antes de la pelea, él vio que apareció una mujer atrás de mí tocándome los hombros y que cuando tomé de su cuello vio en mis ojos algo que ni siquiera pudo explicar. Mi mamá estaba sorprendida mientras que yo caía en depresión, algo estaba controlando mi cuerpo y ya quería que todo esto parara. Mi madre me llevó con un especialista relacionado en ese tema, tenía que estar consultando con él y cada vez que lo hacía comenzaba a limpiarme espiritualmente, me daba instrucciones que hiciera cuando estuviera en mi casa, y me mencionó que las cosas podrían empeorar, ya que el espíritu apegado a mí iba a ser lo imposible por quedarse, y así fue las cosas al principio no mejoraban pues yo sentía la necesidad de hacerme daño, aunque intentaba muy fuerte controlarme. Las pesadillas no paraban, pero aun así yo seguía yendo con fe con el especialista. Mi madre dice que una ocasión mientras mi hermana y yo nos encontrábamos fuera de la casa, ella escuchó unos golpes en la pared que provenían de mi cuarto, cuando fue para asomarse lo único que encontró fue al gato viendo hacia la pared, molesto y gruñendo. Mi madre se asustó tanto que tuvo que hablarle a un padre que fuera a bende
cir la casa, mientras yo seguía yendo con el especialista, poco a poco las cosas fueron mejorando. Sin
embargo, hay días que sueño a esa extraña mujer, espíritu o entidad demoníaca. Actualmente, hay días que aparecen aves en la ventana de mi cuarto con el cuello quebrado. No cuál sea la razón, pero igual no creo que sea normal, esta es la terrible historia que me sucedió en Tepic, Nayarit. Una historia que probablemente aún no termina…
 
Autor: Anónimo
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