Ánima En Pena 2022

Ánima en pena… Luego de trabajar todo el verano, estaba muy entusiasmada, pues aquellos ahorros y dinero que me había ganado dignamente me alcanzaba para poder adquirir aquella pantalla que tanto deseaba, pues la mía se había quemado semanas atrás y eso me impedía poder ver mis series favoritas, pues especificamente me encantaban las de terror y suspenso, pues lo paranormal era aquel género que se me hacia muy interesante.

Así que al dirigirme al callejón donde tenían un sin fin de pantallas tanto de uso como nuevas, recorrí cada uno y aunque ya tenía en la mira aquella que compraría, no descarte la posibilidad de encontrar una mejor oferta.

Después de varias vueltas un sujeto extraño y dudoso se acercó a mí ofreciéndome una pantalla la cual era exactamente la que yo quería, no obstante, esta era de uso, pero a simple vista tenía buena pinta y no contaba con ni un solo rayón, me había explicado que la compró para su hijo, pero este había fallecido de una forma muy extraña, así que el ya no deseaba tener ningún recuerdo de él, pues la nostalgia llegaba a cubrirlo por completo.

Después de varios minutos intercambiando palabras logró convencerme, pues al final del día yo ahorraba dinero y el señor se deshacía de las cosas de su hijo de buena manera, así que hicimos un trato y me lleve a mi casa una buena televisión la cual deseaba con ansias comenzar a usarla.

Fue entonces cuando intenté prenderla y mientras más hacía el esfuerzo esta no respondía, así que me preocupé pues probablemente ese sujeto me había estafado y ya no volví a saber nada de él.

Sin embargo, después de varios intentos por fin logró encender, así que entusiasmada hice un maratón de películas de terror para celebrar aquel suceso, pues esos ahorros no habían sido en vano, preparé palomitas de maíz y me dirigí a mi cuarto, pues una de las cosas que más disfrutaba era mi soledad, aquella que al mismo tiempo me causaba un poco de miedo, pues a pesar de que nunca me había pasado algo paranormal, en el fondo deseaba que sí, quizá por ese motivo nunca me habían dado tanto miedo las historias de espectros, pues una cosa era verlos mediante una pantalla y otra presenciarlas en carne propia.

Así que mientras disfrutaba de una buena película, por un momento me quede dormida, pero fue un momento de la madrugada, donde escuché que alguien susurraba mi nombre, era como si quisieran llamar mi atención pero de una forma sutil, así que entre mis sueños pensé que habían sido mis ideas, las cuales me hacían pensar en muchas cosas tenebrosas.

Fue cuando de repente presencié aquella hipnosis que la cual muchos hablan, aquella que coloquialmente se le llama “parálisis del sueño” o que se te “sube el muerto” pues no podía mover ninguna parte de mi cuerpo, era como si alguien se hubiera apoderado de mi, definitivamente me encontraba fuera de mi cuerpo y fue ahí cuando empezó mi tortura.

Sin duda alguna, traté de hacer todo lo posible porque ese escenario cambiara, pues estaba completamente segura que simplemente me encontraba dentro de una pesadilla y claramente yo quería salir a como diera lugar, fue entonces cuando comencé a presenciar diversas voces y espectros por medio de la pantalla, era como si quisieran salir de ahí, así que por un momento guardé la calma y pensé que era algo pasajero, pues había visto aquellas historias de terror.

No obstante me di cuenta que algo en realidad estaba pasando, fue de un momento a otro donde pude recuperar la conciencia de las cosas, así que me preparé mentalmente para levantarme de la cama después de esa sensación tan extraña y luego de varias vueltas a mi habitación pude observar que no había nada, así que esa noche a pesar de dormir un poco inquieta me hice a la idea de que todo eso ocurrió a causa de mi imaginación.

Con el paso de los días comencé a sentir una vibra muy extraña en mi habitación, incluso mi madre me lo había comentado, pues decía que se siente un frío indescriptible el cual era muy raro, pues en todos los años que tenía habitando ahí nunca había pasado eso, fue cuando entonces mi miedo comenzó a crecer.

Pensaba tantas cosas y nada a la vez, hasta que un día mientras terminaba mis labores y tareas, fue cuando escuché claramente como se encendía la televisión y mientras no había una animación de fondo, la voz de un niño comenzaba a pedir auxilio, era como si se estuviera dirigiendo a mi, así que por un momento pensé que estaba loca o al menos ese miedo e incertidumbre de días pasados me había dejado con muchas preguntas sin responder, no obstante los gritos y lamentos de aquel pequeño comenzaron a se cada vez más evidentes, al punto de querer huir de mi cuarto.

Fue cuando abrí la puerta y al tratar de avisarle a mi madre, me regresé, pues ella claramente no me creería, es más se molestaría conmigo por continuar viendo aquellas historias y películas siniestras que tanto me encantaba ver, así que por esa noche trate de despejar mi mente, apagar la televisión y tratar de pensar que las cosas marcharían bien.

Mientras más pasaban los días mi razón y mi paciencia estaba a punto de reventar, pues realmente ese suceso tan extraño continuaba repitiendo, era como si aquella voz me pidiera ayuda, cuando realmente yo no sabía que era lo que estaba ocurriendo, fue así cuando decidí,

contarle todo a un amigo que también era fanático de aquellas historias y anécdotas , pues por las tardes solíamos hablar de aquellos acontecimientos sucedidos, así que al contarle toda mi historia, partiendo de cero desde aquel hombre que me vendió esa pantalla, lo más lógico que tratamos de suponer era aquel dicho de que las cosas antiguas o pertenecientes a alguien guardaban una parte de la alma de aquel dueño.

Ánima En Pena

Así que al sacar conclusiones sobre eso me causo pánico pensar que yo no era la única persona que actualmente habitaba mi cuarto, si no que ahora también se encontraba el alma de un niño totalmente desconocido para mi que no tenía ni idea en qué condiciones había fallecido, pero que probablemente había sido una tragedia, pues en ese caso no estaría pidiendo la ayuda que cada noche me dejaba en vela.

Traté de mantener las cosas con calma y una vez concretado el asunto supe que quizá podría encontrar alguna respuesta o al menos un testimonio en Internet el cual me ayudara a salir de esta situación que era tan incómoda y tenebrosa para mi, en el fondo sabía que aquella alma no me haría daño, pues se trataba de una persona inocente, sin embargo tampoco podía permitir que un espectro se adueñara de mi habitación y de mis noches.

Así que al encontrar la información que necesitaba, supe que lo más viable en ese momento era trata de entablar una conversación con él y aunque era una tarea de alto riesgo era lo más factible pues evidentemente aquella alma solo buscaba una salida o al menos una ayuda de mi parte, así que traté de conseguir la mayor protección posible como pulseras, velas, incluso un santo el cual me protegiera, pues aquel acto podría costar hasta mi propia vida.

Así que una vez caída la noche, me reuní sola en mi cuarto y preparé todo para que las cosas marcharan bien y a pesar de estar tranquila, le comenté a mi amigo todo lo que haría, esto por si algo llegaba a salir mal, mínimo alguien estuviera al tanto de lo sucedido, así que al prender las velas y esperar a que llegara la madrugada, pude ver a lo lejos una sombra la cual ya no me impresionaba, pues estaba segura de que era aquel alma en pena la cual solo quería el descanso, así que mientras más susurraba, yo trataba de mantenerme de pie.

Fue en ese momento cuando le pregunté que era lo que necesitaba, si se encontraba bien y que al menos me contara aquello que le aquejaba.

Fue en ese momento cuando simplemente escuche un llanto y palabras diciendo “ solo quiero descansar” “ya no quiero seguir en este limbo de tristeza” y así consecutivamente empecé a escuchar lamentos los cuales independientemente de causar terror, generaron tristeza y pena en mi ser, pues realmente esa alma no quería hacerme daño, pero debía irse de mi lado, pues yo no había sido responsable de su muerte, ni mucho menos de que esta se encontrara en un limbo sin fin.

Fue ahí cuando le comenté a aquel reflejo de tras de la pantalla que no se preocupara que todo estaría bien que haría lo posible porque tuviera el descanso eterno.

Así que mientras ponía en práctica una oración para que este niño pudiera irse, fue cuando continuaba llorando cada vez más y más, en ese momento me pregunté como mi madre no escuchaba aquellos ruidos pues cada vez se escuchaban más y por fin entendí que quizá yo era la única persona en escucharlo, él me había elegido para salvarlo desde que su padre me ofrecía la televisión, así que no debía desistir, si no todo lo contrario, en mis manos estaba hacer el cambio y el alma de un niño que claramente no conocía.

Poco a poco comencé a decir unas palabras y fue ahí cuando sentí que alguien comenzaba apoderarse de mi, sentía que mi alma cada vez se encontraba más lejos de mi cuerpo, sin embargo sabía que esto podía pasar, pues estaba realizando algo paranormal, algo que no cualquiera se atreve a hacer y yo estaba dispuesta para que toda esta pesadilla terminara.

Así que solo recuerdo decirle a aquella criatura que no se preocupara, que por fin estaría en casa, fue entonces cuando perdí la conciencia y de un momento a otro me encontraba en la sala de emergencias con mi madre gritando al lado, pude observar mis manos y piernas las cuales se encontraban llenas de moretones, pero en el fondo sabía que aquella alma en pena por fin estaba a salvo.

Al llegar a casa me deshice de aquella televisión y traté de olvidar aquellos malos ratos y aunque desde ese día no volví a escuchar esos lamentos y voces, sigo recordando esta anécdota como si hubiera sido ayer…

Autor: Daniel Flores

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