Los Chaneques En Halloween 2023

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Los Chaneques En Halloween 2023

Los Chaneques En Halloween… Mis primos y yo solíamos jugar a disfrazarnos y salir a pedir dulces los días 31 de noviembre, pues era muy divertido hacerlo, más cuando se trataba de ir juntos, pues solíamos hacer bromas en el transcurso, además que podíamos admirar los disfraces de los demás niños como nosotros, aunque ya estábamos algo grandes para pedir dulces, no nos perdíamos ese día.

A pesar de que mi familia se oponía a celebrar Halloween, nos daban permiso de disfrazarnos, pues mi primo el mayor quien ya iba en la secundaria les explicó que se trataba de una costumbre pagana al igual que el día de muertos, en donde se celebraba a los difuntos y al Dios Samhain y al contrario de lo que todos pensaban.

Halloween no significaba, ni noche de brujas, ni noche del diablo o algo por el estilo que en ese tiempo se solía pensar, sino más bien su verdadero significado era víspera de todos los santos y al igual que nuestra tradición de día de muertos fue cambiando a través del tiempo para volverse un celebración divertida, en la que los niños y adultos disfrutan y aprovechan para disfrazarse, pues se tiene creencia que los disfraces son para ahuyentar a los espíritus malignos y no para atraerlos como muchos lo creen.

Después de todas estas explicaciones que les dio mi primo a mis tíos, tías y papás, nos dejaron por fin salir a pedir dulces y disfrazarnos por tercer año consecutivo.

Nuestra rutina era la misma, salíamos desde la casa del abuelo y caminábamos hacia arriba en la acera del lado izquierdo , llegábamos al final de las calles que subían, pues la colonia en donde vivía mi abuelo era parte de un cerro y al terminar de recorrer de subida, nos disponíamos a regresar por la acera contraria para ahora pedir dulces de ese lado, durante el camino, atravesábamos una barranca que aquí en México es un tipo de riachuelo en donde pasa agua sucia que proviene de las casas aledañas; en esa barranca se contaba que aparecían unos seres conocidos como chaneques.

Los Chaneques En Halloween

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Quienes son conocidos en ciertas partes de México y son unos seres muy similares a los duendes, sin embargo son parte del folclor de criaturas mexicanas, ese día al cruzar el canal no vimos ni escuchamos nada extraño, pero al avanzar unos metros ,después de atravesar el puente que cruzaba dicha barranca, nos dimos cuenta que faltaba uno de mis primos, pues en total éramos 6, pero cuando voltee para saber si veníamos todos de la misma forma en que salimos solo conté 4 de ellos, ínmediatamente me detuve y con un tono desesperado, grité a los demás que faltaba mi primo Luis.

El era el más pequeño y quien caminaba en la parte posterior de los demás, de inmediato les exigí que regresáramos a buscarlo, pues por obvias razones no íbamos a regresar solos a pesar de que Luis sabía perfectamente el camino, además entre primos nos cuidábamos mucho; regresamos unos metros atrás buscándolo, pero no corrimos con suerte, a pesar de gritarle y buscar en los negocios que habíamos pasado, no había rastro alguno de él.

Preguntamos a los señores que pasaban por la calle y además a los niños que también pedían dulces, pero no recibíamos respuestas a favor; transcurrió aproximadamente media hora y comenzamos a entrar en desesperación pues sabíamos que mi primo no podía desaparecer de la nada, además sabíamos perfectamente que era un pueblo pequeño, en donde todos se conocían, casi de inmediato regresamos apresuradamente a la casa de mi abuelo.

Avisamos a mis papás y mis tíos que mi primo Luis había desaparecido, al instante salieron apresuradamente para buscarlo, durante el camino mis primos y yo íbamos llorando pues nos sentíamos culpables de que Luis hubiera desaparecido, nuestra responsabilidad era cuidarlo y por un descuido se perdió, sin embargo, mis familiares trataban de convencernos de que la culpa no era nuestra, sabíamos perfectamente que solo era consuelo, pues dentro de nosotros sabíamos que si salíamos todos juntos debíamos regresar todos juntos también y eso nos hacía responsables de su perdida, además que, nunca nos había sucedido nada parecido.

Avanzamos por todo el camino que recorrimos gritando el nombre de mi primo con la esperanza de encontrarlo. Unos minutos después y estando más tranquilos, contamos detalladamente a mi familia como fue que desapareció, una de mis tías nos interrumpió cuando comentamos que habíamos cruzado el puente del canal y mencionó que lo más seguro era que los chaneques se lo hubieran llevado, pues en noche de Halloween suelen pasar esas cosas y por eso mismo no nos dejaban salir a pedir dulces.

Uno de mis tíos ínmediatamente interrumpió a mi tía diciendo que no nos espantara con esas tonterías, pues eso eran ¨tonterías¨; nos detuvimos un momento, pues íbamos a pie al instante mi tía le recordó a mi tío reclamando y mencionando a la vez sino recordaba los hechos sucedidos 20 años atrás en donde hubo niños desaparecidos, mi tío ínmediatamente le contestó que los niños se habían escapado de su casa porque sufrían maltrato, ya que eran hermanos y vivían todos juntos; se entabló una discusión bastante fuerte al respecto.

Mi mamá con un tono enérgico y con la gallardía de ser la mayor, les exigió que de tuvieran su discusión y siguiéramos el camino para encontrar a Luis, pero noté que mi mamá se tornó algo nerviosa y casi al momento de notar que me di cuenta, recuperó la cordura y nos exigió a los más pequeños que nos mantuviéramos juntos y por nada nos separáramos, pues corríamos el peligro de perdernos también, el comentario de mi mamá lo noté fuera de lugar pues no sabía por qué lo había dicho sin embargo algo me decía que de cierta forma le daba la razón a mi tía, acerca de los chaneques.

Continuamos por toda la calle que sube hacia el cerro buscando a Luis, pero cada vez que avanzábamos perdíamos la esperanza de encontrarlo, mi tía de nuevo insistió en que no era cuestión de que mi primo se hubiese perdido, más bien que los chaneques lo habían raptado y teníamos que hacer algo pronto, porque de lo contrario no podríamos encontrarlo de nuevo.

Un poco más angustiados y ya desesperados le hicimos caso a mi tía y le preguntamos, qué es lo que tenía pensado hacer? ella dijo que rápidamente regresáramos a la casa porque tenía el teléfono de una señora que sabía cómo tratar con ese tipo de seres elementales, sin pensarlo nos dirigimos a la casa de mi abuelo.

Efectivamente mi tía sacó una tarjeta del tarjetero levantó el teléfono para marcar, tardó varios minutos escuchando y respondiendo algunas cosas, supongo que era algo que le preguntaba la señora del otro lado del teléfono, entonces después de varios minutos y con el estrés hasta el límite colgó, no esperamos un momento más para preguntarle qué había sucedido y qué le había comentado la señora, ella preocupada, dijo que teníamos que llevarle algunas cosas a esta para que pudiera localizar a mi primo, pues era real que los chaneques se lo habían llevado.

Necesitaba hacer ciertos rituales para poder saber en dónde estaba y además quitarle la protección que los chaneques ponían para no encontrarlo, le preguntamos apresuradamente qué es lo que le había pedido la señora, ella solamente se limitó a decirnos que le había pedido algunas hierbas y algunos elementos más, pero casi al mismo tiempo mencionó que no había tiempo, que tenía que ir por ellos, a pesar de que eran cerca de las 12:00 de la noche, mi tía salió a la calle en busca de los artículos que la señora le pidió, pues sabía que cada minuto qué pasaba podría ser fatal.

Nosotros angustiados porque mi tía se había ido y no regresaba y además perdíamos tiempo para encontrar a mi primo, quisimos salir de nuevo para seguir buscándolo, pero en el momento en que íbamos de camino a la puerta de la salida mi tía llegó con mucha prisa, le pidió a mi tío que la llevara con la señora para entregarle lo que le había encargado; mi tío sin dudarlo arrancó su coche lo sacó de la cochera, mi tía subió y se fueron rápidamente a la casa de la señora, que se encontraba casi en la cima del cerro.

Transcurrió aproximadamente media hora y mis tíos regresaron a la casa de mi abuelo; sin bajarse del coche, nos pidieron que subiéramos rápidamente, pues la señora les había dicho que mi primo Luis se encontraba debajo del puente bajo un hechizo poderoso que los chaneques habían puesto sobre él, sin pensarlo mis padres y mis demás tíos subieron al coche, pero al momento en que mis primos y yo quisimos subir de nuevo para retomar la búsqueda nos comentaron que debíamos permanecer en la casa del abuelo, pues no iban a tomar el riesgo de que alguno de nosotros también se perdiera.

A pesar de oponernos e insistir en ir con ellos nos contestaron con un rotundo no y nos cerraron la puerta con seguro, para no poder salir.

Mientras todo esto pasaba mi abuelo dormía su siesta, pues él tenía una edad avanzada, debía de descansar temprano, entonces decidimos no hacer ruido y subir a un altar que él tenía en el primer piso; comenzamos a hacer oración para que nuestro primo estuviera bien, pues entre la plática que mis tíos y padres sostenían, mencionaban que Luis no había sido bautizado y que por ese motivo los chaneques se lo habían llevado.

El bautismo era necesario para evitar este tipo de situaciones, tanto con chaneques como con brujas, pues los niños no bautizados eran como un majar para ellos, mientras comentábamos todo lo anterior transcurrieron aproximadamente 15 minutos y escuchamos que el zaguán de la casa se abría rápidamente y el coche de mi tío entraba muy apresurado, nosotros sin titubear, bajamos apresuradamente, dándonos cuenta que mi primo venía con ellos, sin embargo, parecía estar en shock o bajo algún tipo de conjuro que no lo dejaba hablar ni quitar la mirada de un punto fijo.

Además que estaba pálido y un poco rígido de su cuerpo, en ese momento por el alboroto que se ocasionó mi abuelo despertó y preguntó qué pasaba, pues no sabía nada de lo acontecido; mi tío le contó todo rápidamente pues no tenían tanto tiempo para poder hacer el proceso que la señora les había comentado y así recuperar la cordura de mi primo; entonces mi abuelo antes de que terminaran de explicarle lo que pasaba les pidió con voz enérgica guardaran silencio a todos los demás para poder hablar.

Cuando todos enfocamos la atención a él, preguntó en qué estábamos pensando, pues realmente lo sucedido no había sido porque habíamos salido a pedir dulces esa noche, sino que, por las noches los chaneques rondaban los lugares húmedos y oscuros y por eso mismo, la gente no acostumbraba a salir después de las 10 de la noche y mucho menos se le permitía a los niños salir, entonces mi abuelo muy enfurecido preguntó quién nos había dejado salir.

Nosotros comentamos que habían sido nuestros tíos en general y que mi primo Ricardo agregó que el Halloween no era malo, mi abuelo movió la cabeza de un lado hacia otro y al mismo tiempo se dirigió a su cuarto y nos indicó que esperemos un momento, esperamos aproximadamente un par dé minutos y regresó con una bolsita, esta contenía un amuleto; preguntamos para qué era dicho amuleto y él nos dijo que nos apresuramos a ponerlo cerca de mí primo, pues esto le ayudaría a reaccionar rápidamente; lo acercamos a un lado de su cuerpo y enseguida reaccionó.

Cuando despertó nos preguntó qué es lo que había pasado, pues no recordaba nada, sino solamente que estábamos atravesando el puente del canal, nosotros le platicamos la historia, entonces él mencionó que sentía raro su cuerpo, pues sentía que por dentro estaba vacío, sin embargo, fue un acontecimiento al que no le enfocamos demasiada importancias, pues el objetivo era que él reaccionara y pudiera contarnos qué había pasado y así poder ayudarlo.

Mi abuelo después con un tono enérgico nuevamente nos dijo que nos calláramos pues que lo que decía mi primo era muy importante, porque lo que hacían los chaneques era robarse por medio del aliento su espíritu y en algunos casos su alma, no sé si mi abuelo estaba mintiendo, quería asustarnos o realmente era la verdad, pero en el momento con la angustia decidimos escucharlo.

Nos dijo que lo lleváramos con la señora para saber si lo podía ayudar porque si pasaba mucho tiempo, Luis podía quedar permanentemente en shock y sin poder reaccionar más, a pesar de llevar consigo el amuleto que le había obsequiado, pues había pasado mucho tiempo bajo el conjuro. Mi tío de nuevo tomó sus cosas, subieron a mi primo al auto y se apresuraron a la casa de la señora.

Cuando llegaron a casa, la señora salió rápidamente pues se dio cuenta que habían acudido nuevamente con ella y además era una situación grave, sin perder tiempo les mencionó a mis tíos que mi primo iba en condiciones graves, pues los chaneques casi habían absorbido por completo su alma; mi tía comenzó a llorar y comenta que en ese momento rezó con toda su fe para que mi primo pudiera seguir con vida, mi tío por otra parte caminaba de un lado a otro buscando la forma de ayudar a mi primo, aun sabiendo que ya le estaban brindando ayuda.

Mientras mis tíos esperaban, comenzaron a platicar de lo acontecido con mi primo, pues ellos nunca habían creído en la existencia de los chaneques, mientras hacían algunas conjeturas para saber qué es lo que pudo haber pasado, la señora salió del cuarto donde trataba a Luis y le comentó a mis tíos que todo estaba mejor, pues había podido salvar a Luis, pero mencionó que a partir de ese día los chaneques iban a buscarlo, pues de alguna forma Luis con la ayuda de mis tíos había escapado de ellos.

Además la señora comentó que los chaneques buscan niños o personas para jugar con ellas y alimentarse de su alma o espíritu, pues son el mejor alimento para que puedan seguir existiendo, además que era su alimento favorito, la señora describió los chaneques de la siguiente manera: pequeños, del tamaño de un duende, pero tenían una cara gris con orejas puntiagudas, además sus facciones asemejaban a un adulto mayor; también advirtió que a partir de ese día evitara pasar por canales, riachuelos o puentes que pasaran sobre alguno de estos, pues para él el riesgo de ser raptado de nuevo sería mayor.

Minutos después la señora salió con mi primo ya curado, mis tíos comentan que se le dibujó una sonrisa de alivio a mi primo, pues a pesar de no saber qué es lo que pasaba se notaba muy tranquilo, desde el momento en que salió del cuarto de la señora, abrazó fuertemente a sus papás y les preguntó que pasaba, pues no sabía por qué estaba ahí, aunque vagamente recordaba que por momentos sentía que entraba a un vacío y se perdía en este.

Sus padres le comentaron todo lo que había ocurrido y que desde que lo rescataron había tenido una actitud diferente y sentían que su forma de actuar era distinta y por ese motivo habían buscado ayuda con la señora.

Luis, a partir de ese día comenzó a ser susceptible a fenómenos sobrenaturales, pues podía ver y sentir entidades que antes no podía, además que ciertas veces tenía premoniciones y nos avisaba cuando algo malo pasaría, sin embargo nunca fue la misma persona, a pesar de que sabíamos que estaba bien, su mirada parecía haberse perdido desde el día que lo encontraron, le faltaba la luz en sus ojos que lo caracterizaba y su forma de ser ya no era la misma tampoco, pues ahora era un chico introvertido a quién le costaba trabajo convivir con más persona.

No le gustaba salir de su casa, ni siquiera salir a las fiestas que se hacían en familia para la celebración de algún cumpleaños o fecha importantes, algunas veces comentaba que no quería seguir sintiendo ni viendo cosas sobrenaturales, pues no era tan agradable del ver la forma de estos seres, mucho menos saber que estos seres podían verlo a él, pues algunos de ellos querían hacerle daño, otros querían comunicarse con sus seres queridos a través de él y eso no le agradaba en lo absoluto.

El abuelo durante mucho tiempo trató de ayudar a mi primo para que dejara de ver estos seres, acudió con algunos brujos, sin embargo nunca tuvo éxito, pues todos coincidían en que mi primo al haber sido raptado por los chaneques y aparentemente haber entrado a otro plano astral sin querer, hizo que fuera susceptible observar este tipo de fenómenos, por eso mismo no pudieron ayudarle, pues decían que su alma y espíritu habían cruzado de una dimensión a otra, lo cual lo hizo susceptible a este tipo de fenómenos.

La única solución es que Luis debía de adaptarse a este nuevo estilo de vida, pues durante toda esta continuaría observando este tipo de fenómenos.

Tuvieron que pasar muchos años para que mi primo se acostumbrara a la vida que hoy tiene, además, siempre porta un amuleto que la señora le obsequió, el cual sirve para que los chaneques no lo encuentren por qué a pesar de que después de lo acontecido Ínmediatamente lo bautizaron, parte de la esencia de los chaneques quedó en él, además de la marca que estos colocaron en su alma para poderlo encontrar de nuevo.

Tuvieron que pasar muchos años para que mi primo se acostumbrara a la vida que hoy tiene, además, siempre porta un amuleto que la señora le obsequió, el cual sirve para que los chaneques no lo encuentren por qué a pesar de que después de lo acontecido Ínmediatamente lo bautizaron, parte de la esencia de los chaneques quedó en él, además de la marca que estos colocaron en su alma para poderlo encontrar de nuevo.

A partir de ese día nuestra familia tomó la decisión de no dejarnos salir a pedir dulces el 31 de octubre, pues al contrario de lo que mi primo mayor había contado, acerca de la costumbre de Halloween, nos quedó como un amargo recuerdo el día que Luis fue raptado por chaneques, y ahora todos los 31 de octubre evitamos celebrar Halloween como muestra de respeto hacia nuestro primo y lo que sucedió, simplemente hacemos una pequeña celebración entre familia y los niños de la casa, para obsequiarles dulces sin que salgan a la calle.

Luis nos ha visitado un par de veces en estas fechas, pues ahora se ha especializado en ayudar a la gente con algún problema de naturaleza sobrenatural, y nos menciona que varios días 31 de octubre ha salido en busca de los seres que le hicieron daño alguna vez para poder deshacerse de ellos, pues él comenta que ahora ya sabe el procesos para poder hacerlo, sin embargo, no ha tenido éxito en encontrarlos y todos esperamos que no los encuentre, pues tememos que le hagan daño de nuevo y esta vez no pueda escapar de ellos.

Quiero mencionar a toda la gente que escucha este relato, que tomen la celebración de Halloween como una celebración más , un día para divertirse y dejar a un lado las creencias que se tienen acerca de este día, pues a pesar de los hechos desafortunados que sucedieron con nuestra familia, sabemos que la mayoría de las personas toma este día festivo como la oportunidad de disfrazarse de su personaje de terror favorito, sin embargo tomen con respeto las creencias que sus familias tengan acerca de este día, pues no sabemos si en algunos casos, vivieron algo similar al relato anterior.

Autor: Hugo de Gante.

Derechos Reservados.

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