Macabro Hallazgo Historia De Terror 2023

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Macabro Hallazgo Historia De Terror 2023

Macabro hallazgo, Historia De Terror… En pocos lugares se llega a percibir tanta energía, como lo es una Morgue. Quizá solo sea igualada por un hospital, aunque las energías que se acumulan allí son diferente. Es imposible no estar en un lugar así y no percibir cierta sensación de vació y tristeza.

En todos los años que llevo trabajando, por mas que intente hacerme el frío, pero no puedo evitar pensar, sobre que habrá sido de aquellas personas a las que diseccionamos, tendrían familia, y la pregunta que mas me quita el sueño en la noche: ¿Sería consciente de su muerte?
Hace años me ocurrió una situación en la que quizás pudiera darme una respuesta a esta pregunta.

Aunque sé que muchas personas no me van a creer, se que no soy el único al que le han ocurrido este tipo de cosas y que las personas que trabajan en hospitales o en medicina forense como yo, me entenderán. Me da igual, se lo que me ocurrió.

Por aquel entonces trabajaba en una Morgue judicial, soy originario de Uruguay y en la guardia laborábamos dos médicos forenses y un patologo.

Un día nos llego un caso extraño, sobre todo porque no se nos quiso decir mucho sobre el cuerpo en cuestión. Lo único que se nos pidió es dar las posibles causas de muerte, lo cual fue algo complicado de hacer.

El cuerpo era muy extraño, mostraba incrustaciones de pequeñas piezas de metal por todo el cuerpo y aunque de primera mano, pensaría uno que este tipo de heridas ocurrieron en el accidente que le llevó al sujeto a la muerte, pero no, estas heridas estaban cicatrizadas, el metal había sido aceptado por su cuerpo, siendo de el, algo demasiado extraño, pues ese tipo de heridas terminarían por causar una infección letal en el organismo, no obstante, el cuerpo aparentaba llevar ya mucho tiempo con esas pequeñas piezas de metal.

Total que estuvimos realizando labores hasta muy tarde y no dábamos con la causa de muerte, teníamos varias teorías, pero ninguna que fuera lo suficientemente convincente.

No encontramos alguna herida mortal, ni daño alguno en un órgano vital, el corazón no presentaba daño o muestra alguna de infarto.

Comenzábamos a desesperarnos.
De repente comenzó a fallar el sistema eléctrico. Quedamos a oscuras un par de veces. Nos dimos por vencidos y justo cuando íbamos a devolver el cuerpo a los refrigeradores, un estruendo muy fuerte sonó en uno de los corredores.

Yo brinqué y de inmediato mire la bolsa donde estaba el cuerpo, mientras me imaginaba que en cualquier momento se movería, como en las películas de terror, pero esto no ocurrió, en cambio, comencé a percibir una oscuridad que provenía de los refrigeradores.

Al principio pensé que era mi mente jugandome una broma a causa del estrés de no encontrar una causa, sin embargo, después de escuchar a mis compañeros preguntando sobre que era eso que estaba saliendo de los refrigeradores, supe que desafortunadamente era verdad.

No sabría como describirlo a la perfección, era una oscuridad tan profunda, mas negra que el mar de noche y espesa como neblina. Algo dentro de esa niebla nos dejó paralizados, yo sentía como si me hubieran amarrado con alguna especie de soga y como si esa oscuridad entrara por dentro de mi.

Escuchaba una voz, que no se parecía en nada a la de mis compañeros, decir que no investigáramos mas, que no lo volviéramos a tocar o conoceríamos el infierno en la tierra.

No se cuanto tiempo habrá durado aquello, pero cuando pude moverme, corrí a ver a mis compañeros, que concordaron conmigo, acerca de lo que escuché. Decidimos dejarlo así, como un simple evento extraño, igual que tantos que ya nos han ocurrido.

Cuando llegué a casa, después de bañarme, me pase a servirme un poco de brandy, aunque intentaba evitar pensar en lo que me ocurrió en la morgue, aquel día, sentía los nervios hechos nudos. Como les he dicho, aunque las personas me conocen, como alguien frío que no demuestra sus emociones, en el interior no puedo evitar sentir pena por algunas victimas, y en esta ocasión, me sentía asustado, pues sabía que mi mente no pudo haber inventado esa voz, esas palabras.
El brandy logro derribarme, me quede dormido en la sala viendo un programa local.

Desperté de madrugada. La pantalla estaba apagada, bueno, eso aparentaba. Yo no recordaba haberla apagado, es raro que me quede dormido en un lugar que no sea mi cama. Me puse de pie y de pronto noté que la pantalla, no estaba realmente apagada, la señal de la antena se había perdido solamente.

La señal comenzó a volver, pero en lugar de verse un canal, comenzó a verse estática, los hilos a blanco y negro, formaron hilos, que tomaban una forma circular, al final se formaron unos ojos, una boca, nariz, era un rostro cadavérico, que a mi parecer, reflejaba angustia.

De pronto la cara comenzó a hablarme, esto hizo que me levantara de una manera muy abrupta del sillón, no podía creer lo que estaba pasando.
La voz empezó a quejarse de una manera horrible, yo sentía los nervios hechos trizas. El rostro empezó a decirme que “el” lo mató, que buscara en el estomago. Estaba a punto de salirme corriendo del apartamento, cuando en la pantalla se sintonizo al fin un programa de tele ventas y en lugar de salirme de la casa, desconecté la pantalla.
Como pueden imaginarse, no volví a dormir en toda la noche.

Cuando volví al trabajo, intenté contarles sobre lo que pasé la noche anterior a mis compañeros, pero estos me cambiaban de tema y fingían no tomarme en cuenta para nada. Al principio me sentí molesto, pero supuse que mas bien, por el miedo que sentían, preferían ignorar lo que había ocurrido.

Cuando volvimos a sacar el cuerpo extraño del refrigerador, propuse que volviéramos a revisar el estomago.

Cual sería mi sorpresa, que este estaba todo dañado. Era algo extraño, hasta el patologo lo dijo, no existía alguna manera en que las paredes del estómago sufrieran ese daño, parecía como si algo le hubiera arañado desde dentro, hasta causarle una hemorragia mortal en las paredes estomacales.

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Entonces yo pensé, que quizás aquel hombre, falleció por haber ingerido esquirlas de metal, sin embargo, no encontramos ningún rastro de metal, ni en su estómago, ni en los intestinos. Solo unos tejidos extraños, que extrajimos para hacer análisis.

Yo estaba casi seguro de que aquellos tejidos revelarían la causa del fallecimiento del sujeto.

Los siguientes días, mis compañeros estuvieron mas abiertos a platicar sobre el asunto.

Ellos a diferencia de mi, habían vuelto a experimentar la oscuridad que nos abrazó aquel día, sobre todo el patologo, mencionaba haber experimentado esto cada noche, se sentía aterrado igual que yo.

Cuando tuvimos los resultados del análisis, de lo que encontramos en el estómago de aquel hombre, nos encontramos con algo tan macabro, que aun me cuesta algo de trabajo contener el vómito y los escalofríos, cada vez que lo recuerdo.

Los tejidos eran humanos. En pocas palabras, aquel hombre cometió canibalismo.

No pudimos explicar, que fue lo que le causó esas heridas en el estómago, según el examen toxicologico, no ingirió ninguna sustancia que le ocasionara una hemorragia o las heridas que mostraba en los tejidos dentro del estómago.

Tuvimos que maquillar el informe forense, aunque sí mencionamos que encontramos restos de otra persona dentro de su estómago.
Total que el caso se cerró y paso el tiempo suficiente para que nos olvidáramos de lo ocurrido.
Pero los espectros no se olvidaron de nosotros.

Una noche, mientras veía una película en línea, mi pantalla se puso en modo televisión por si sola y una vez mas, se me reveló el mismo rostro, solo que en esta ocacion, no dejé que hablara, desconecte la pantalla en cuanto apareció.

Desgraciadamente, esto solo ocasiono que el mismo rostro se me revelara en otros lados, como en mis sueños, una vez en un espejo y hasta en el retrovisor de mi auto.

Mis compañeros me dijeron que también tenían problemas del tipo paranormal, sobre todo por las noches.
Buscamos ayuda con un sacerdote, que solo nos recomendó hacer unas oraciones y nos dio agua bendita para rociar en nuestras casas.

Yo lo hice, pero no me funcionó para nada, al contrario, ahora escuchaba la voz de ese rostro bajo mi cama.
Pase varias noches durmiendo en el sofá, pues allí no escuchaba la voz de aquella aparición.
Como a mis compañeros les seguía ocurriendo lo mismo, decidimos contactar una médium.
Aquella mujer, nos pidió que la lleváramos a la morgue. Así lo hicimos, la llevamos y después la dejamos sola, pues así lo requirió la mujer.

Nos quedamos tras la puerta, puedo jurarles que ninguna de las apariciones que vi, ni ninguna voz paranormal que escuché, se comparaba con el horror que sonaba dentro de la morgue, no se como la médium soporto estar tanto tiempo dentro en ese horror.

Cuando al fin salio, nos dijo que tuvo contacto con dos espíritus, era de un hombre muy sentí enloquecer, ni siquiera pude hacerle frente con las oraciones que me indicó la médium.
Preferí buscarla para pedirle que me bloqueara la vista.

Desgraciadamente esto no se logró a la primera, y tuve que soportar a esta entidad durante algunos días, en los que sentía que iba a enloquecer. Ese rostro era tan horrible, sus ojos grises, sin alma, reflejando una angustia inhumana.

Pasando seis días, la pesadilla terminó, ya no volví a ver, ni a oír a esa entidad.
A la fecha no he vuelto a escuchar cosas tan aterradoras, solo cosas simples y trilladas, como el tipico vaso que se cae solo de la mesa, nada grave.
Un tiempo estuve tentado a investigar mas sobre aquel hombre, pero el simple recuerdo de todo lo que me pasó, es suficiente para frenarme.

Autor: Mauricio Farfan.

Derechos Reservados.

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